Primer día del año,
me quedan 364 oportunidades que quizas despreciaré.
Porque aún la borrachera no se me ha ido
y siento que no puedo olvidarte.
Si no puedo despertar a tu lado,
es un nuevo año que sea ha vuelto viejo en sentimientos.
Si extraño tu mirada y el calor de tus manos
¿cómo puedo seguir mirando el mañana?.
Cuando he cambiado las estaciones del tiempo al partir de mis tierras,
ellas... que me regalaban las palabras para endulzar tus oídos.
Hoy voy sin rumbo...
tengo un reloj vacío de horas sin vos.
Y la nada se apodera de mi corazón,
las madrugadas se vueven frías sin tu amor.
Un beso que se quedó detenido en ese momento...
en el que no te animaste ha romper con la rutina.
La pasión se fue secando por ser tu dueño,
pero tu sensibilidad peleaba para que no sea un naufrago en la selva de cemento.
Sin embargo... ya no hay hechizo que te vuelva a mi,
cuando un ángel vuela al cielo.
Y mis afectos solo pueden reclamar a una lápida,
de la cual no puedes escapar,
para saber... si realmente juntos,
hubiéramos sido felices.
Raúl Bulacio
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